La queratitis es una inflamación de la córnea, la estructura más anterior y transparente del globo ocular, que puede ser debida a múltiples causas. Si afecta solamente a su parte externa (el epitelio), que es lo más frecuente, se llama queratitis superficial y suele curarse sin secuelas. Por el contrario, si afecta a capas más profundas se trata de una queratitis ulcerativa, menos habitual pero que puede ser muy grave. Cuando deja una cicatriz en la córnea (leucoma), la visión llega a verse severamente comprometida.
Antes de empezar a tratar la Queratitis, se debe tomar una muestra de la zona infectada para prodecer a su cultivo y saber exactamente que microorganismo está produciendo la infección. Normalmente con la aplicación de colirios específicos contra el microrganismo causante de la infección bastaría; pero en ocasiones tras su curación puede aparecer una cicatriz que si se localiza en el centro de la córnea, se tendrá que intervenir con un transplante de córnea para devolver su transparencia deseada.